Los juicios por delitos de lesa humanidad han tenido en
la Argentina el respaldo del gobierno
a partir de la administración de Néstor Kirchner, posicionando al país como
líder en este campo del derecho
internacional. Muchos de los culpables de terribles vejaciones, tormentos,
torturas y asesinatos han tenido
que enfrentar a sus víctimas, sentados
y esposados en el “banquillo de los
acusados”.
Muchas víctimas han recreado
sus padecimientos y han
enfrentado sus traumas, con valor y la
convicción de esto deba ser es un
legado para las próximas generaciones., aun a
costa de su salud. Muchos de los ex presos
políticos, desaparecidos o hijos
de asesinados por la dictadura cívico
militar se han sentado a escuchar los testimonios desgarradores de lo que
hicieron estos traidores que solamente
buscaban implementar una matriz
económica diseñada por las grandes potencias a partir de
1948 en lo que se denominó
doctrina de seguridad interior, un
conjunto de medidas que aseguraban en el
tiempo la implementación de la
receta económica diseñada en la
universidad de Chicago, y de la
cual Milton Fredman fue su máximo exponente. Estas medidas
incluían la persecución ideológica
como excusa para el plan de
dominio continental.
Recientemente en la Argentina se llevó
a cabo un juicio donde se
vincula por primera vez el delito económico con los delitos de
lesa humanidad. El caso de los hermanos
Iaccarino, como se lo conoce, es vinculante
del objetivo económico como
fin de la maniobra represiva en la que estaban inmersos “los defensores de
los valores occidentales”. Primer juicio
de su tipo en el país, y por el cual,
una familia entera fue
secuestrada el 4 de Noviembre de
1976 y solo recuperaron su libertad
22 meses después; despojados de sus bienes a cambio
de la vida de los tres hermanos.
Como una muestra de derechos en democracia, dos acusados, quienes ya cumplen condenas por su accionar en otros
casos, fueron juzgados con todas las garantías
constitucionales, y fueron
acusados, no con penas solicitadas por la fiscalía, sino por penas mínimas, según lo dispuso
el tribunal federal oral N°1 de
la Plata, Pcia de Bs.As. Argentina.
Si bien esta condena
no refleja los sufrimientos y el accionar de estas personas
en la maniobra coactiva, es el primer paso para desenmascarar una trama que se mantiene a lo
largo de estos 37 años, en la que unas 600
familias sufrieron esta suerte, incluida la familia Gravier en el famoso caso de papel prensa, y que al resultado
de este controvertido fallo, que no contempla el secuestro
extorsivo sino solo el delito de vejaciones,
deja en evidencia que nuestra región aun debe
trabajar en el tema judicial, el que evidentemente, a pesar de las 300 pruebas, ha
fallado en forma controvertida.
Casenave Hector // Agencia
Sudakka // agenciasudakka@gmail.com
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